Piano en la Colegiata



Buauuuuh ¡qué noche más bonita! pasear y merendar por un Santillana abarrotado de gente... y sin campamento ni niños que cuidar, todo el público en silencio escuchando a Ludmill Angelov en el Claustro de la Colegiata. Los Estudios de Chopin, al intermedio puse mensajitos de añoranza a Barbara y a Sandra. Y después a dormir al parador de Requejada... al can Kaka 2 de Anaïs. ¡Que felicidad!.

1 comentario:

Almudena dijo...

¡¡Alaaaa!! ella dando envidia. Sólo te falta decir que habéis dormido con manta ;)

Desconsiderada.
Besucos, disfrutad.