Han sido estupendas todas las ponencias de VERANOS CULTURALES del programa de Cabuérniga de este año. Y tuve el honor de presentar a Ricardo y a Chito con su conferencia sobre la Guía insólita y secreta de Cádiz. ¡ Como me acorde de Ramón Viadero y de la Guia secreta de Santander del año 75...!
En cincuenta años, todas las ciudades de España han cambiado y mejorado muchísimo. Las guías de viaje también, de aquellas que editó Everest, en blanco y negro, con tapas duras, a las Trotamundos tan útiles... y después a las colecciones de las turísticas de Planeta, del Pais Aguilar con unas fotografías superiores... Yo haría dos grandes bloques: las turísticas y las literarias, indiscretas, insólitas ... Todas estupendas, antes, durante y después de los viajes. Primero la ilusión de preparar y descubrir, después la verificación in situ, y por último, el recordatorio, cuando tiempo después al volver a abrir tu guía y encontrar dentro entradas de museos o tiquets del tranvía te hace sonreir y revivir alguna anécdota del viaje...
Ahora, en público doy las gracias a Ricardo de Castro por haberme facilitado con su guía conocer mejor Cádiz. Como dijo un día Frugoni "las ciudades son libros que se leen con los pies" . Frase que popularizó Quintin Cabrera, el compositor y cantoautor también uruguayo, que luchó por los derechos y libertades y que quiso tanto a Montevideo que llegó a verbalizar: "Busqué lugares más bellos y aunque los pude encontrar, nunca pude amarlos tanto, como quiero a mi ciudad" y esto me hace acordarme de una de las frases de Borges que plastiqué en los marcapaginas para el "Recortango a Borges" en el 25 aniversario de su muerte y que decía "Siempre he sentido que hay algo en Buenos Aires que me gusta. Me gusta tanto, que no me gusta que le guste a otras personas... es un amor así, celoso... Fue en la librería Agora de Palma, yo leía los y y al tiempo Leticia Garcé cantaba tangos...